sábado, 11 de junio de 2022

Mantenimiento a los 75.000 km

Toca mantenimiento

Faltando dos meses para que el coche cumpla los dos años, he llegado a la revisión de los 75.000 km. Esta pandemia se ha llevado muchos negocios por delante y los talleres de coches no son una excepción. El concesionario y taller de Colindres ha cerrado y ahora solo queda el taller de Santander con lo que no se lo ponen nada fácil a los que vivimos en la Cantabria oriental. Aun así llamé a Auto Norte para pedir cita pero como estaban de huelga por el convenio del metal tuve que llevarlo a Karealde de Barakaldo que encima me queda mucho más a mano.

Dana Motor, víctima de la reestructuración del sector

Lo que ya no me gustó tanto fue el precio ya que por la misma revisión hecha en Septiembre del año pasado pagué 20€ menos (84€ frente a los 104€ de esta ocasión) siendo exactamente los mismos conceptos. Y lo peor es la constante subida de precios que va produciéndose con el paso del tiempo que a mi entender no tiene justificación.

Como se muestra en la siguiente tabla, incluso pasando la revisión en el mismo taller, en el mismo año, con solo seis meses de diferencia y por los mismos conceptos, el incremento de precios total ha sido del 9,55%; pero analizándolo con mas detalle el Pack de Mantenimiento, que básicamente es tiempo de trabajo, se ha incrementado en un 12,25% y todo ello en el mismo año.

Comparativa de los tres primeros mantenimientos

El truco está en desligar el precio de la mano de obra de los llamados Packs. Mientras el precio de la mano de obra se mantiene invariable durante todo el año, los precios de los Packs suben según les convenga y sin tener que dar explicaciones. Así, si el cliente se fija en el cartelito con los precios de la mano de obra que hay colgado a la entrada del taller, siempre verá marcado el mismo precio todo el año con lo que su percepción será de que los precios se mantienen.

Y luego vienen las diferencias de precio entre talleres de la misma marca, según el territorio y nivel salarial. Tras 9 meses y un cambio de año entre una revisión y otra vemos como el incremento de precios ha sido del 19,22%, 26,86% en el caso del Pack de Mantenimiento y que en los 15 meses que han pasado desde la primera revisión el precio del mismo mantenimiento ha pasado de costar 75,99€ a 104€; es decir, un 26,93% más.

Revisión en el taller Peugeot Karealde

Estoy a la espera de saber, cuando termine la huelga del metal, qué precio me hubieran dado en el taller de Santander y a partir del dato decidir si me merece la pena desplazarme más lejos. En todo caso no hay que perder la perspectiva de que tras 75.000 km, según mi Histórico de Gastos, los mantenimientos me han costado 283€ frente a los 360€ que gasté en mi Grand Scenic III en los primeros 60.000km. Puede parecer poca diferencia pero si trasladamos los precios de 2010 a la actualidad, solo teniendo en cuenta el IPC a pesar de que hemos visto que los precios de los talleres suben mucho más que dicho IPC, tendríamos un coste equivalente a día de hoy de 443€, es decir, 160€ ahorrados en mantenimiento tras recorrer 15.000km más.

En el apartado de problemas varios, las escasas actualizaciones de software que he tenido en el coche no han solucionado un par de detalles que aunque no son preocupantes si son molestos. Uno es el cambio de idioma en las pantallas y que se da de vez en cuando. Como buen gabacho, su configuración vuelve al francés de origen y creo que ocurre cuando apuro mucho la capacidad de la batería de tracción. Otro es la activación del AC de forma involuntaria. En el norte, gran parte del año, no es necesario activar el AC porque es suficiente con el fresco que entra desde el exterior así que generalmente configuro el climatizador con el AC apagado. Y normalmente nunca reparo en la pantalla del climatizador ya que generalmente llevo puesto el Android Auto, el navegador o la radio. Y lo que pasa es que en ocasiones noto reseco en la garganta y enseguida veo que el AC se ha activado solo. Tengo la teoría de que cuando arrancas el coche en días muy calurosos la "inteligencia" del vehículo toma la iniciativa y lo activa por su cuenta.

El sonido proviene de la pinza trasera derecha de freno

Más preocupante es el ruido sordo que se produce en la pinza trasera derecha cuando pisando el pedal pasa a trabajar el freno mecánico. Lo he llevado ya dos veces al taller, la primera vez no pudieron reproducir el ruido pero la segunda, al conducir yo y saber como provocarlo, pudieron escuchar de que se trataba. En todo caso piensan que es una holgura del cilindro o de las propias pastillas y que empezarían por cambiar pastillas pero como no entran en la garantía y están prácticamente nuevas, otra de las ventajas del coche eléctrico, me dicen de no tocar nada hasta que haya que cambiarlas. Mi miedo es que normalmente las holguras suelen ir a más y podría tener una avería mas seria fuera del plazo de garantía, pero como ha quedado constancia de ello por escrito, ya me pelearé con el taller en un futuro.

El trato en el taller de Karealde fue correcto aunque me pareció excesiva la espera de treinta minutos hasta que me atendieron y sobre todo la otra media hora que necesitaron para hacer la recepción del vehículo. Acostumbrado al anterior taller en el que no tardabas mas de cinco minutos en firmar los documentos de entrada, este me pareció demasiado burocrático y lento. Por otro lado, en las dos ocasiones en las que he llevado el coche, no han cumplido ni el compromiso de dejar el coche al 80% de batería ni el de limpiarlo tras la visita. Es cierto que en la primera visita el coche solo estuvo 3 horas en el taller y al salir me dieron un vale para lavar el coche en otro momento pero en la segunda ocasión que el coche estuvo mas de 7 horas, ni me lo lavaron, ni me dieron un vale, ni me lo cargaron hasta el 80%.

Una admisión no muy rápida

En todo caso sigo contento con el coche y el ahorro en cada kilometro recorrido te anima a seguir haciendo rutas, sobre todo ahora que con las placas solares tengo la posibilidad de cargar kilómetros a coste cero. En este sentido decir que en el Histórico de Gastos e Histórico de Consumos anoto todos los kWh cargados en casa multiplicados por el precio del kWh del contrato vigente en cada momento a pesar de que un alto porcentaje de las cargas caseras, en torno al 75%, se producen solo con los excedentes de mi instalación fotovoltaica y por lo tanto son gratis. Pero he decidido hacerlo así porque es un dato más realista ya que no todo el mundo puede cargar en casa con energía solar. Aunque ahora, gracias a la compra conjunta que hizo la OCU me beneficio de la tarifa fija de Repsol las 24 horas del día por 0,12 €/kWh, desde que tengo el coche los precios de la energía que ha recargado la batería han oscilado mucho; entre 0,03€/kWh y 0,26€/kWh.

Ya solo me queda publicar como me ha ido, si lo he conseguido o no, que Peugeot me informe del nivel de degradación de la batería. De momento solo puedo avanzar que todo son pegas, buenas palabras e inacción por parte de la Atención al Cliente de Peugeot. Pero cuando lo consiga o desista del asunto publicaré una entrada sobre el tema.

Gracias a todos los que gastáis vuestro preciado tiempo en leer este blog y un saludo.

jueves, 2 de junio de 2022

Viaje a Bueu - Pontevedra. Un recorrido de 1.319 km en dos días.

En Bueu se celebraba el Campeonato de España de Trainerillas y pensé que era una buena oportunidad para viajar con el Peugeot, próximamente cumple ya dos años, y de paso comprobar como había cambiado el panorama y las posibilidades de carga en la cornisa cantábrica tras mi último viaje a Santiago de Compostela.

Balizas del campo de regatas

El plan era salir en sábado y llegar para antes de las seis de la tarde que empezaban las tandas clasificatorias de la final del día siguiente. La idea era ir por la Autovía del Cantábrico (A8) hasta el cruce con la Autovía del Noroeste (A6) y luego a la altura de Lugo coger la Autovía Santiago-Lugo (A54) hasta Palas de Rey para continuar luego por carreteras secundarias, no quería pagar peajes y además quería revisitar los pueblos de mi infancia, hasta Pontevedra y luego Bueu.

Recorrido del viaje

Google Maps estimó 640 km y algo más de 7 horas para completar el recorrido. Si además añadimos los desvíos hasta los cargadores más alejados de la ruta, como el de Tapia de Casariego, Gijón o Pontevedra, el recorrido total resulta ser de 654 km. Como tardé 2 horas y 46 minutos en cargar el coche en las cinco estaciones de carga elegidas, el viaje duró un total de 9 horas y 57 minutos, 2 horas y 48 minutos más que si hubiera ido con un vehículo de combustión.

Como en mi viaje ya está incluida la parada para comer, que siempre la hago coincidir con una carga, entonces la diferencia no es tan grande porque si añadimos a la estimación de Google Maps la hora de comer y un par de paradas de 20 minutos para estirar las piernas tenemos que la diferencia entre el viaje con el eléctrico y con uno de combustión es de solo 1 hora y 8 minutos en favor del vehículo de combustión. Si por otro lado sopesamos también el asunto económico, tenemos que el gasto total con el eléctrico fue de unos 47 € por trayecto mientras que con uno de combustión rondaría los 72 €

La gran desventaja sigue siendo la incertidumbre que tiene todo el tema de carga. La poca infraestructura de carga que hay en el viaje a Bueu condiciona la carga a unos puntos muy concretos. Esto te obliga a realizar trayectos mas cortos para mantener una cierta reserva de kilómetros por si ocurre algún imprevisto con el cargador. Con un vehículo de combustible, si la gasolinera elegida está cerrada, siempre encontrarás otra mas o menos cercana para repostar.

¿Y cuáles son los imprevistos más normales hoy en día? pues básicamente tres: que te encuentres el punto de carga sin servicio, que no puedas operar por errores de puesta en marcha y que ya esté alguien ocupando el punto de carga. El primero rara vez me ha pasado, el segundo, si llevas las tarjetas y la aplicación de carga de la compañía, no suele dar problemas y el tercero, cada vez más común, es el que más te puede trastocar el viaje. Por suerte, las 2 horas y 46 minutos que pasé cargando el coche no contempla ninguna de las anteriores situaciones.

Los cargadores de EDP, si tienes su tarjeta, son muy fáciles de operar. Basta con pasar la tarjeta por el lector, elegir el tipo de conector en la pantalla y luego enchufar la manguera y listo. Para terminar lo mismo, pasar la tarjeta por el lector y pulsar finalizar en la pantalla. Me parece muy bien que haya que pasar nuevamente la tarjeta por el lector para terminar la carga ya que en algunos cargadores esta opción permanece en la pantalla durante la carga y cualquiera que pase por ahí la puede detener y fastidiarte la carga. El precio de la recarga es relativamente caro, 0,45 €/kWh, pero suele haber descuentos si recargas el monedero electrónico de la tarjeta. Aun tenía dinero en el monedero electrónico de una promoción anterior en la que por 50 € te lo cargaban con 100 €. Para la vuelta tuve que recargar nuevamente el monedero pero esta vez el descuento no fue tan suculento: por cada 50 € recargados te regalaban solo 10 €.

Cargador EDP a las afueras de Gijón 

Los cargadores de EasyCharger (ahora Zunder) son los más sencillos de operar. No necesitas tarjeta de la operadora y no tienes que cargar ningún monedero electrónico. Abres su aplicación en el móvil, seleccionas la boca de carga y enchufas la manguera. Para terminar pulsas la parada en la aplicación y listo. Lo único que criticaría es la forma que tienen de codificar las mangueras (2001P2-A, 2701P1-B, etc.) pero una vez te haces con ella es muy sencillo. Tras la subida del precio de Iberdrola a 0,39 €/kWh, Zunder se han quedado sola en el primer puesto del ranking de cargadores rápidos mas económicos, manteniendo los 0,3 €/kWh.

Cargadores Zunder del Área de Servicio 507 de Outeiro de Rei

Mención a parte tienen los cargadores del Parking de Santa Clara de Pontevedra. Además de que tienes que gastar un dinero extra en el parking para acceder a ellos, me costó un euro el tiempo que estuve cargando, están operados por una empresa que no conocía. Tienes que entrar en la página web del distribuidor, identificar el punto de carga, el tipo de manguera, el correo electrónico donde recibir la factura, el importe a cargar y los datos de la tarjeta de crédito. Una vez rellenados y validados los datos, enchufas la manguera y comienza la carga. Si quieres detener la carga pulsas terminar en la pantalla y listo. Los carteles anunciaban precios diferentes en función de la velocidad de carga pero no había manera de seleccionar uno u otro. Se supone que la carga a 120 kWh cuesta 0,4 €/kWh y a 60 kWh 0,35 €/kWh pero el vigilante del parking me comentó que solo está operativa la carga de 120 kWh aunque yo no noté una velocidad mayor que otras veces. Es de agradecer que el vigilante, si tienes problemas con la operativa del cargador, puede activar la carga y cobrarte directamente ya que en la mayoría de los casos, los responsables del parking o gasolinera donde está el servicio de carga, se desentiende de los cargadores.

Cargadores del Parking de Santa Clara en Pontevedra

Pero como he dicho, el mayor imprevisto se produce cuando alguien está ya cargando y tienes que esperar a que termine. Si te lo has encontrado al final de la carga perfecto, pero si aun le queda mucho por cargar, de repente tu parada de 30 o 40 minutos se convierte en mas de hora y media dependiendo del caso. Y ahí está la cuestión porque, por ejemplo, si tienes la mala suerte de encontrarte con un Tesla model S con una batería de 100kW seca y cargando a 50kWh puede pasarse más de una hora cargando. Lo mismo ocurre si el propietario, sea el eléctrico que sea, quiere cargar su batería al 100%. Entonces la espera se duplica en tiempo porque entre el 85% y el 100% la carga va muy lenta.

El problema es que no puedes gestionar de ninguna manera tu espera, el coche está ahí cargando pero no conoces las intenciones de su propietario, si va a cargar hasta el 50%, hasta el 80% o lo va a dejar cargar hasta el 100%. Y lo peor de todo ocurre en los cargadores de algunas empresas que tienen dos bocas de carga rápida DC y una para carga lenta AC pero que no admiten simultaneidad. Y te encuentras a un hibrido enchufable, todo mi respeto para sus propietarios, cargando en el enchufe AC durante tres o cuatro horas y bloqueando la carga rápida. Y como la infraestructura de carga es escasa, el hecho de ir a otro cargador no te garantiza que esté libre o en una situación parecida o peor a la anterior.

Así que como quería llegar antes de las 6 de la tarde, hora a la que empezaba la competición en Bueu, dejé otras 2 horas y 30 minutos más como margen para los dichosos imprevistos por lo que el viaje comenzó a las 5:23 de la mañana. Al final, como no hubo contratiempos, llegue 2 horas y 30 minutos antes de la hora así que aproveché para registrarme en el hotel y dar una vuelta por el puerto.

Llevo bien las esperas mientras recargo el coche, sobre todo en viajes en solitario. Los lugares no suelen ser paradisiacos pero los aprovecho para estirar las piernas y sumergirme y poner orden en mis pensamientos.

La primera parada fue la Estación de Servicio de la Vega a la altura de Llanes. A las 7 de la mañana una docena de camiones, tras dormir por la noche, empezaba a desperezarse para retomar la ruta. El cargador, como infraestructura advenediza a la gasolinera, se colocó donde menos molestaba y acabó con sus huesos en la parte trasera del edificio principal, al lado de los contenedores de basura. Estoy acostumbrado a ello, hay veces que he tenido que dar un par de vueltas a la gasolinera para encontrar el punto de carga. Es un icono incomodo para ellos y lo tratan de alejar de su vista porque les muestra un futuro en el que cada vez habrá menos surtidores de gasolina. No hay mucho que hacer en los 30 minutos de espera así que doy paseos en circulo por las instalaciones, el aparcamiento de camiones y una zona industrial compuesta por tres o cuatro empresas y de vez en cuando me paro ante el cargador: la batería carga un 10% a cada vuelta que doy. Pensé: "solo tengo que dar 6 vueltas y habré cargado lo suficiente". Me vuelvo a sumergir en mis pensamientos.

Estación de Servicio de la Vega en Llanes

La segunda parada está en la entrada de Gijón, al final de la Avenida de Oviedo, en un promontorio que da la espalda a una Estación de Trasformación gestionada por EDP. Hace un año aquí había un cargador rápido y un surtidor de GNC (Gas Natural Comprimido). Ahora han quitado el surtidor de gas y colocado otro cargador rápido que aun no está operativo. Hay muy pocas estaciones de servicio para GNC y aquí han quitado una, no sé si esto es algo anecdótico o un aviso a navegantes. Mientras dura la carga suelo estirar las piernas bajando por la Avenida de Oviedo y mirando los escaparates de un par de exposiciones de coches y mas abajo, si la carga es profunda y son más de las 10 de la mañana, me acerco hasta el Corte Ingles. Llegar andando al centro comercial y volver son 32 minutos así que solo da tiempo a un vistazo por la primera planta. En esta ocasión, como de Llanes a Gijón gasté poca batería y era todavía muy temprano, me conformé con un paseo corto y en poco mas de 20 minutos ya había cargado al 85%.

Nuevo cargador de Gijón

El tercer punto de carga me gusta más que los anteriores. Es cierto que hay que desviarse 2,5 km de la A8 pero es un buen sitio si has desayunado muy pronto, como es el caso. El surtidor se sitúa en un polígono industrial de Tapia de Casariego. Al lado del cargador rápido operado por EDP hay dos gasolineras y un centro comercial cuya panadería es excelente. Siempre aprovecho para desayunar algún bollo recién hecho y acompañarlo con yogurt o alguna fruta. Luego, como sobra tiempo, deambulo por las hileras de estanterías del centro comercial y continúo mi paseo por las aceras del polígono industrial. Debería llevar una bolsa para recoger caracoles. Es un polígono industrial joven y hay mucha parcela sin construir y las zonas de hierba están repletas de caracoles. Supongo que hay pocos depredadores "de dos patas" que se dediquen a deambular por la zona ya que allí vas a lo que vas: echar gasolina o hacer las compras de la semana y no te dedicas a pasear.

Cargador de Tapia de Casariego

En la cuarta parada, dependiendo de la hora, suelo aprovechar para comer mientras cargo el coche pero esta vez lo tenía programado casi en el destino. El Área de Servicio 507 de Outeiro de Rei se sitúa en un sitio estratégico de la ruta entre Madrid y A Coruña. Se compone de un gran edificio central, una gasolinera BP y una esplanada gigante para aparcar camiones. Dispone además de dos cargadores rápidos de Zunder (antigua EasyCharger) a un precio muy competitivo. El tiempo de espera lo paso echando un vistazo a la tienda de regalos, yendo a su limpísimo servicio y tomando algo en su amplia y tranquila cafetería.

Es una pena que antes de llegar a Bueu haya que meterse en un parking del centro de Pontevedra para repostar en el único punto de carga rápida en muchos kilómetros a la redonda. Menos mal que Pontevedra es una pequeña ciudad y el fin de semana no hay mucho tráfico. En el parking Santa Clara hay dos cargadores rápidos de 120 kWh y otro dos de carga AC. Eran algo mas de las dos de la tarde así que fui a la Trattoria Nonna Clara (puesto 17 de 269 en el ranking de restaurantes de Pontevedra) que está a 3 minutos del parking y comí una fantástica ensalada. Veinticinco minutos después de partir de Pontevedra y pasadas las tres y cuarto de la tarde estaba aparcado en el municipio de Bueu, con el estomago lleno y muy descansado a pesar del largo viaje.

Bueu es un bonito y tranquilo pueblo de la Ria de Pontevedra

No os voy a contar mucho de mi estancia en Bueu, tan solo aclarar que los resultados de la regata clasificatoria no fueron del todo satisfactorios para los intereses y expectativas del club del que soy seguidor por lo que adelanté mi regreso al domingo a las 9, en vez de quedarme a ver la regata y la entrega de premios de una final en la que no participábamos.

La vuelta del domingo fue una copia de la ida, en los mismos puntos de recarga y sin incidentes reseñables. El mayor inconveniente de viajar en domingo es que los ya de por si inhóspitos entornos en los que se sitúan los cargadores se acentúan aun más al estar todo cerrado y sin vida. Los únicos que se salvan fueron el de Outeiro de Rei y el de Llanes que mantenían sus cafeterías abiertas. Para rematar el viaje, a 8 kilómetros de Castro Urdiales, me topé con la caravana de Vascos que regresaban a casa tras el fin de semana y que me retrasó media hora. La noche del domingo al lunes dejé cargando el coche hasta el 100% para poder hacer la estadística precisa. 

Tabla del viaje

En resumidas cuentas, si planificas bien y no tienes prisa, los viajes en un coche eléctrico, que no va sobrado de batería, son posibles. Eso si, la paciencia será tu mejor aliado y a partir de ahí, disfrutarás de los paisajes y de la carretera.

Tengo dos nuevas entradas preparadas para el blog pero hasta que no se aclaren algunas cosas no podré terminarlas y próximamente llega la esperada revisión de los 75.000 km que tengo programada para el 7 de junio y de la que también daré buena cuenta en otra entrada.

Un saludo a todos y ¡felices viajes!